El jabón ofrece doble eficacia al eliminar todas las impurezas responsables de la piel apagada y nutrir la epidermis. Este tratamiento automático es muy recomendable para reducir las manchas provocadas por cicatrices, embarazo, exposición solar y envejecimiento de la piel. El jabón se adapta perfectamente a todo tipo de pieles, incluso las más sensibles: sus activos hidratantes y calmantes tienen un efecto antiestrés, preservando así el equilibrio natural de la piel.